23 de diciembre de 2013

Balística XXI

LA PRUEBA BALÍSTICA EN EL JUICIO ORAL

La Balística Criminal y la Balística Forense - Mario A. Del Giudice Franco

CAÑÓN
Es un tubo cilíndrico hueco, en cuyo interior (ánima) se encuentra el rayado helicoidal o poligonal. El cañón está capacitado para soportar grandes presiones, altas temperaturas y resistir el continuo y reiterado paso forzado de los proyectiles, los cuales provocan con el transcurrir del tiempo, un desgaste a consecuencia de la corrosión química de los gases, la erosión producto del calor y la fricción, aumentando milimétricamente su diámetro específicamente cerca de la boca del ánima del mismo.

El cañón desde el punto de vista físico de la balística cumple con objetivos fundamentales que incide directa y positivamente sobre el proyectil, éstos son:

1) Genera un movimiento de rotación (giro) en el eje del proyectil, que le permite vencer relativamente los efectos meteorológicos (resistencia del aire, condiciones atmosféricas, gravedad, Etc.)

2) De acuerdo a su longitud, aumenta el movimiento de traslación (trayectoria) del proyectil en el aire incrementando el alcance efectivo y máximo.

3) Permite que el proyectil se mantenga dentro del parámetro de la línea de fuego.

4) Favorece la trayectoria que se encuentre dentro del alcance del objetivo.

Referencia bibliográfica. La prueba balística en el juicio oral. La balística criminal y la balística forense. 5ta. Edición, 2013. Vadell Hermanos Editores. P. 83.